La función principal del cloro es desinfectar, eliminar bacterias y gérmenes del agua en la piscina o alberca. Como papel secundario generalmente el cloro tiene que oxidar ciertos contaminantes como los desechos provenientes de los usuarios y los metales. Si la carga de desechos orgánicos es demasiada, el cloro puede agotarse o reducirse rápidamente descuidando su papel principal y requiriendo mayores niveles de cloro. Es por eso que en Orenda sugerimos el uso de enzimas o un sistema secundario de oxidación y lo establecimos como nuestro segundo pilar del cuidado proactivo en la piscina.
Si se dedica al mantenimiento de piscinas o es dueño de una, tal vez haya escuchado acerca del uso de las enzimas para mejorar el rendimiento del cloro, pero sabe exactamente que son o cómo funcionan? Antes de explicarlo, tiene que tomar en cuenta lo siguiente:
- Este artículo tiene como objetivo hacer que la química sea facil de entender. Se simplifica para facilitar la lectura y utiliza analogías para el lector comun sin experiencia en química orgánica.
- Las enzimas en el agua de la piscina no deben confundirse con los desinfectantes (como el cloro). Las enzimas no están diseñadas para matar o desinfectar bacterias, virus o cualquier otro tipo de germen o algas. Están diseñados para abrirle el camino al cloro, el cual es el mejor desinfectante.
¿Qué son las enzimas?
Según diversas fuentes las enzimas son proteínas que funcionan como catalizadores biológicos de reacciones químicas. Su propósito es iniciar o acelerar reacciones entre tipos específicos de moléculas. Dichas reacciones no podrían ocurrir sin su acción. Una vez que se completa una reacción, la enzima avanza para encontrar más componentes y así generar otra.
En nuestro cuerpo hay miles de enzimas y se pueden encontrar muchas más en la naturaleza. Algunas de ellas sirven como una especie de plantilla para replicar nuevas moléculas. Es como cuando un carpintero usa una plantilla para hacer 100 formas que deben encajar con precisión. Otras enzimas actúan como PacMan, comiendo todo a su paso siguiendo un apetito muy específico. Estas enzimas son voraces y comerán de lo que se les ponga enfrente siempre y cuando forme parte de su dieta, y nada más.
Las enzimas CV-600 y CV-700 de Orenda son diseñadas para digerir los desechos orgánicos a base de carbono. Buscan específicamente compuestos orgánicos no vivos que se encuentran en el agua: aceites corporales, sudor, piel muerta, saliva, mucosa, protector solar, compuestos orgánicos del medio ambiente (y así sucesivamente).
Efecto surfactante
Los tensioactivos o surfactantes se encuentran en casi todos los productos de limpieza del hogar, como por ejemplo el detergente para la ropa y el jabón para platos. Los surfactantes son responsables del poder de corte de grasa del jabón para platos, donde una sola gota hace que la grasa se elimine. Técnicamente hablando, los surfactantes hacen esto al reducir la tensión superficial molecular. Si desea más información sobre el tema, por favor siga este enlace. Para nuestros propósitos, los surfactantes son compuestos que separan otros compuestos a nivel molecular.
Los surfactantes pueden variar de ser muy seguros a ser muy peligrosos (en cuestión al manejo), dependiendo de lo que tengan que separar. Los surfactantes de resistencia industrial pueden ser tóxicos, mientras que algunos son lo suficientemente seguros para incluso beber si están disueltos en agua.
Los desechos orgánicos y su efecto
Imagine que está en un concurso de comer la máxima cantidad de carne posible. Le dan la opción de comer usando solo sus dientes o de usar un cuchillo para cortar la carne en pedazos más pequeños, que seria mas rapido y eficiente? Ahora imagínese que le asignan un equipo que le ayudará a cortar los pedazos y también a comerselos, mejor aun no?
Pues en esta analogía, la carne son los desechos orgánicos en la piscina, y usted es el cloro. La eliminación de estos desechos orgánicos se puede ejecutar de las siguientes maneras:
Oxidación por parte del cloro
En la situación mencionada, esta sería la opción de comerse la carne, utilizando los dientes, sin cuchillo o utensilios. También es como casi todas las piscinas han tratado su agua durante décadas. El cloro trata de oxidar (quemar) todas la partículas de carbono complejas, pero el cloro requiere mucho, mucho esfuerzo para descomponerlo todo. Tiene que superar la demanda antes de que se pueda alcanzar la el punto de ruptura de la cloración y la posterior desinfección.
Además, a menudo hay tantos desechos orgánicos en la piscina que el resultado es un desorden orgánico parcialmente oxidado y una gran cantidad de cloro mal usado. En una piscina, a la medición del cloro usado se le llama cloro combinado. Cuando el cloro combinado es alto (por ejemplo, más de 0.2 ppm), a los operadores a menudo se les enseña a "sacudir" la piscina o hacer un choque con cloro. Scott Webb lo resume de la siguiente manera:
Sin ser demasiado técnico, el choque con cloro es un proceso para eliminar las cloraminas y la alta concentración de cloro combinado en la piscina. Es básicamente obtener las lecturas de cloro total y cloro libre para luego restarlas y obtener el cloro combinado. Luego se hace un choque agregando 10 veces la cantidad de cloro libre, lo cual se piensa que destruye las cloraminas.
Por supuesto, ese plan funcionaria al 100% si el cloro libre agregado realmente destruyera las cloraminas. En realidad, solo destruye una cantidad parcial.
La teoría es bastante simple: al agregarse una gran cantidad de cloro a la piscina, los contaminantes serán oxidados y las cloraminas serán destruidas. Como lo explicamos en este artículo, las cloraminas son compuestos generalmente a base de nitrógeno que se forman cuando el cloro intenta oxidar ciertos contaminantes y no logra hacerlo por completo. Desafortunadamente la destrucción de las cloraminas requiere una gran cantidad de cloro y son estos subproductos de la desinfección lo que causa irritación en la piel y los ojos de los usuarios. Las cloraminas también pueden vivir en el aire y ser nocivas para la salud, es por eso que muchas instalaciones invierten en buenos sistemas de ventilación y sistemas de desinfección como los rayos UV.
Eliminando los desechos orgánicos con enzimas
Las enzimas son el ejemplo de "cortar la carne en varios pedazos y compartirla con un equipo". Mientras el cloro hace su trabajo de desinfección, no tendrá que preocuparse por oxidar los desechos orgánicos a base de carbono, ya que las enzimas los habran digerido y desechado en forma de CO2 y H2O, eliminandolos completamente del agua, previniendo no sólo su oxidación y un mal rendimiento del cloro, si no también un mejor funcionamiento del filtro.
Es importante repetirlo: las enzimas Orenda no desinfectan el agua de la piscina, el cloro lo hace. Todo lo que hacen las enzimas es limpiar el camino para que el cloro haga su trabajo de mejor manera.
Orenda Technologies utiliza una mezcla patentada de surfactantes y enzimas; la única mezcla en el mercado que es certificada por el estándar 50 de la NSF. Lo cual significa que los productos Orenda no son tóxicos ni peligrosos para el medio ambiente o las personas. También son increíblemente efectivos en el tratamiento de piscinas debido a su alta concentración, incluso para los problemas más desagradables.
Residuos orgánicos y las bacterias
Las bacterias y otros gérmenes, a diferencia de los compuestos orgánicos complejos a base de carbono, generalmente son organismos simples y unicelulares. Cuanto más simples son, más fáciles se replican y propagan. Esto los convierte en un blanco fácil para el cloro, siempre y cuando el cloro no se use tratando de oxidar problemas más grandes (como una bola de pelo flotando en la piscina).
Si el cloro no tuviera que quemar tantas de estas moléculas orgánicas más complejas, habría más cloro disponible para matar esas bacterias simples más rápido, lo que a su vez dejaría un agua más saludable, limpia y cristalina en la piscina.
Pero esto nos presenta las siguientes preguntas:
P: Si las enzimas Orenda dirigieren los productos orgánicos, ¿también pueden digerir bacterias?
A: No, porque las bacterias son material vivo. Estas enzimas están formuladas para consumir únicamente sustancias orgánicas no vivas y desechos.
P: El excremento es un residuo orgánico no vivo. Si una piscina está usando enzimas Orenda, ¿los operadores de la piscina aún necesitan hacer un choque con cloro y cerrarla durante unas horas después de un incidente fecal?
R: Sí, los operadores aún necesitan chocar la piscina con cloro y cerrar la piscina, según los requisitos del código de salud. Las enzimas de Orenda se descomponen y digieren gran parte del problema, pero los riesgos para la salud se deben a las bacterias en las heces que, como acabamos de comentar, no son desinfectadas por las enzimas. El choque por cloro es necesario por razones de salud y seguridad.
P: Nuestra piel está cubierta con capas de piel muerta. ¿Las enzimas intentaran comernos?
A: Pregunta legítima, pero la respuesta es no. Sin embargo, las enzimas digieren ciertas secreciones de nuestra piel, como el sudor y los aceites. También comen piel que se desprende de nuestros cuerpos. Pero incluso si las enzimas intentarán comer nuestra piel muerta, sería menos notable que el efecto del cloro, el cual quemaría nuestra piel.
La diferencia de Orenda
Pueden existir varias marcas en la industria que producen enzimas para el agua recreativa y piscinas o albercas. Sin embargo nuestras enzimas son uno de los productos más concentrados y efectivos además de contar con la certificación del estándar 50 de la NSF, lo cual significa que nuestras CV-600 y CV-700 son seguras para el medio ambiente y las personas.
Los competidores pueden compensar esta diferencia de calidad agregando más surfactantes a su receta y menos enzimas. Si bien estos productos pueden hacer que una piscina brille a corto plazo, pero el efecto pronto desaparece. Gran parte de la efectividad y concentración de nuestras enzimas es debido a que las enzimas Orenda no fueron diseñadas primeramente para piscinas, originalmente eran fórmulas para aguas residuales industriales.
La diferencia en la calidad del agua
Pero cuál fue el cambio más notable?
Después de salir de la piscina, su piel no está tan seca y su cabello no se siente seco y quebradizo. Para los nadadores, ese es un gran problema. La mayoría de los nadadores abandonan la piscina temprano en la mañana y van directamente a la escuela, por lo que el cloro permanece en su piel todo el día y su cabello necesita más y más shampoo.
¿Qué pasaría si ya no necesitara tanto cloro y todavía tuviera una piscina limpia y saludable? ¿Y qué pasa si elimina la necesidad de los choques de cloro en la piscina con excepción a incidentes fecales? ¿Cuanto dinero podría ahorrarse si el cloro siempre estuviera a 100% de eficiencia? ¿Qué podría hacer para la comodidad de sus clientes y para la salud de la piel y el cabello de los usuarios, a largo plazo? ¿Qué podría hacer eso por la apariencia, reputación y costos de mantenimiento de su piscina?
Costos de mantenimiento
Las enzimas Orenda y el cloro circulan por todo el sistema de filtración. Juntos, limpian el interior de tuberías y filtros. Muchas veces, los filtros se obstruyen debido a los desechos orgánicos causando el fenómeno conocido como canalización, el cual describimos en este artículo. Los productos Orenda descomponen esos desechos, lo que reduce la necesidad de mantenimiento del filtro (cómo reemplazar la arena del filtro o restaurarla). También puede reducir la frecuencia de los retrolavados, ya que reduce la suciedad y desgaste de la arena en los filtros.
El uso de enzimas en piscinas es una alternativa no tóxica, no peligrosa y ecológica al choque con cloro. Sirven para un propósito diferente que los desinfectantes secundarios como los rayos UV, porque circulan por toda la piscina en lugar de quedar atrapados en la sala de bombas esperando que pasen los contaminantes.